23-Diciembre-2015 – Según datos aportados por el Ministerio de Fomento, el precio medio del metro cuadrado de la vivienda libre se ha situado en 1.476€ en el tercer trimestre de 2015 lo que supone una variación interanual del +1,4%. Si aplicamos la corrección de la inflación (que ha bajado en este año) el aumento es del +1,8%.
Es el segundo trimestre consecutivo de crecimiento nominal del precio tras los 26 trimestres de caídas interanuales en el precio de la vivienda, que se iniciaron en el cuarto trimestre de 2008.
¿Esto es bueno o malo? Parece ser que, históricamente, las subidas en el precio de la vivienda van asociadas con un incremento de la compra-venta. Esto nunca lo hemos entendido, ya que se supone que el principio que rige la economía en general, es que si un producto es barato, se vende mucho. Y si es caro, se vende poco.
En el caso de las viviendas sucede al revés. Si bajan de precio, los analistas dicen “la gente no va a comprar viviendas, porque esperarán a que bajen más”. ¿Alguien nos lo puede explicar?
En cualquier caso, si este incremento contribuye a la reactivación del sector inmobiliario, bienvenido sea. Pero a nosotros no nos gusta que suban las viviendas. Son un bien de primera necesidad y además no olvidemos que, si bien desde el comienzo de la crisis (año 2008) han bajado en total un 34,1%, siguen estando mucho más caras (en torno al doble) que antes del comienzo de la burbuja inmobiliaria, alrededor del año 2000.